miércoles, 9 de octubre de 2013

 ESQUINA

A    Andrés Felipe Molina,  ciclista compulsivo.

Detrás de cada poste 
está la huella del perro que lo orina,
la protección efímera del delincuente
para parapetarse de la bala,
el afiche del desaparecido que se busca vivo
pero que se presume muerto desde hace dos días.
Detrás de cada poste está la sombra del ebrio que se aferra
al mundo del concreto.
Hoy el gris de la tarde matiza el crepúsculo que roza
el automóvil sin frenos que genera un accidente
en la próxima esquina, donde la joven prostituta, negocia y  lo esquiva.
Cada poste es una vela, en el gran pastel que es la ciudad
desmoronada en calles y el pavimento como harina,
la invitación a destapar las cañerías sin romper,
que esconde abortos devorados por las ratas.

                                             OCTUBRE


Arrojas tus hojas al azar
soplas a los hombres y  a las mujeres,
vientos de tiempos nuevos y memorables.

Conjugas la violencia
y tu naturaleza criminal,
con un verde de árboles que giran
y giran en hojarascas con el aliento de la tristeza.

Espera y crece para morir,
frondece para ser leña...

Octubre, 
eres papel y noción,
palabra sin tilde y recuerdo;
cabes en un bolsillo 
y en las manos del malabarista del truco manido. 

Caes a pedazos, sobre seres muertos que caminan.